COMENZÓ EL MONTAJE PARA LA MUESTRA «EVOLUCIÓN – REVOLUCIÓN» DE PABLO ALBERTO RAPOSO

13 - enero - 2017

Una nueva muestra se inaugurará en el Museo Municipal de Arte mañana a las 20.30 en la sala de avenida Roca 444. Se trata de “Evolución-Revolución” de Pablo Alberto Raposo (Popaul), que se podrá visitar hasta el 31 de enero.

El Museo Municipal de Arte suma una nueva propuesta para disfrutar esta temporada de verano. La apertura de la exposición de esculturas “Evolución – Revolución” se llevará a cabo el 14 de enero a las 20.30 horas. En tal oportunidad, se realizará una proyección de sombras de arena de los artistas invitados Alejandro Bustos y Natalia Gregorio.

Con una serie de 14 obras, el artista Pablo Raposo (Popaul) ya comenzó con el montaje de su muestra cuya palabra clave es reciclar. El objetivo es promover respeto hacia la naturaleza mediante una reflexión sobre nuestro entorno inmediato y su problemática. La vía de comunicación que plantea el artista es a través de esculturas de chatarra en comunión con apoyaturas museológicas diseñadas e intervenidas.

Oriundo de Cipolletti, Pablo Alberto Raposo comenzó a los 10 años sus primeras incursiones en arcilla en talleres municipales de arte, donde descubrió el mundo de las «formas con sentimientos». A partir de allí, inició un recorrido que lo llevaría a recrear animales reales e imaginarios entre huesos, hierros y todo tipo de desechos.

Estudió Biología y Diseño de Exhibiciones para museos y encontró, a través de estas herramientas, la excusa para fusionar ciencia y arte, empresa difícil desde la teoría aunque no así desde lo visual y conceptual.

En los últimos años, Popaul llevó a cabo numerosas muestras didácticas para organismos diversos: CONICET, Ecocentro, Museo del «Hombre y el Mar», Áreas Naturales Protegidas, Museo de Malvinas y el C.N.R. (institución análoga al CONICET en Italia).

 

 

 

EVOLUCIÓN – REVOLUCIÓN

El artista denuncia que la modificación que ejercemos sobre la naturaleza es irreversible y lo expresa de esta manera: “El ser humano altera su entorno del que obtiene beneficios. Con la tecnología y el cambio de parámetros culturales, la huella humana impacta otras especies. La ciencia descubre y saca a la luz el problema. A través de ella, podemos comprender que no hay vuelta atrás y que parte del perjuicio nos toca de cerca. Pero el egoísmo sostiene un sistema perverso de usufructo en base a la oferta y la demanda que empuja a correr riesgos. Miramos estas consecuencias como expectadores, quitándonos del medio, como si no nos afectaran. Nos vamos penosamente acostumbrando a estos cambios y sólo reflexionamos ante catástrofes, sin tomar conciencia de los problemas que nos llevan a éstas. En un extremo de perversidad, los que denuncian la realidad corren peligro de vida; sólo en Latinoamérica, en los últimos cuatro años, mataron a más de 200 líderes ambientales”.

Este artista comprometido nos invita a “mirar viendo” y a través de sus formas y procesos demuestra que una de las claves es reciclar.

«Reciclar es una noble tarea, es reintroducir al sistema energético algo que por alguna causa quedó afuera. La energía no se crea ni se destruye, pero el objeto que perdió función y que vuelve transformado contribuye a quitar material basura para convertirlo en nueva fabricación. La basura es recurso, un lenguaje que entienden los utilitaristas. Me duele ver como en 25 años Puerto Madryn, hospedando entes y organismos relacionados con la ciencia y el medio ambiente, avanzó hacia un estado deplorable. El esfuerzo en la búsqueda del conocimiento no se traduce en políticas públicas sin voluntad. No sirve saber que, en medio siglo habrá contaminación, no sirve saber que las especies padecen mutaciones y caídas poblacionales. Se requiere más. El arte es una forma pacífica de contagiar esta reflexión e invitar a un cambio de hábitos”, dice Popaul.