SASTRE: “EL MUNICIPIO DE MADRYN ADHIRIÓ AL PACTO DE SAN ANTONIO DE PADUA EN LA LUCHA CONTRA EL NARCOTRÁFICO»

3 - abril - 2016

“Hace ya mucho que venimos transitando este camino de lucha contra todos los flagelos, y ahora hemos adherido al Pacto de San Antonio de Padua, del cual forman parte una gran cantidad de Intendentes de todo el país, sobre todo de Provincia de Buenos Aires. Es un compromiso institucional que sostiene 10 puntos fundamentales, de políticas en las cuales nos sentimos inmersos desde hace tiempo” destacó el Intendente Ricardo Sastre.

“Entre estos puntos clave del Pacto, se encuentran el de continuar con la lucha activa contra el narcotráfico, intensificar acciones para la prevención de la droga dependencia desde la niñez y la contención para la reinserción social de las víctimas, entre otros”, admite Sastre.

Los otros puntos del Pacto de “San Antonio de Padua” en el cual Sastre suscribe junto a cientos de Intendentes del país, señalan que se debe trabajar para erradicar el hambre y la desnutrición infantil; combatir con todo el peso de la Ley y del Estado la Violencia de Género e Intrafamiliar; proteger a la familia como célula básica de la sociedad y la vida humana desde la concepción; alentar el uso de energías bajas en carbono, entre ellas, las renovables; combatir la pobreza; trabajar para el acceso universal a la salud, la educación de calidad y al agua potable; fomentar la cooperación para erradicar el trabajo y abuso infantil, la trata de personas, y todas las formas modernas de esclavitud; entre otras.

 

 

 

“MUCHOS AÑOS”
Si bien el encuentro con Francisco I se dio más adelante, el Intendente Ricardo Sastre recuerda que “desde que comenzamos con esta gestión en 2011 el Municipio tuvo un vuelco notable con respecto a la implementación de políticas dedicadas pura y exclusivamente a la lucha contra el narcotráfico y el flagelo de las adicciones, políticas que hasta ese entonces no existían en la ciudad”.

Y admite que “nos ha servido muchísimo cada una de las decisiones que hemos tomado en ese sentido, ya sea la de cada actividad deportiva que se hizo como Fútbol Valorado, Fútbol Nocturno; con el fin de sacar a los chicos de la calle, como así también cada uno de los talleres culturales que han servido para trabajar junto a cientos de jóvenes de la ciudad, y que se vieran fortalecidos con un trabajo de fondo apuntado por el Municipio, con la creación de las líneas telefónicas donde se denuncia la venta de drogas en la ciudad, y los casos de trata”, dice el Intendente Sastre, agregando que “por colaboración de esa línea de celular (15495-9595) hemos podido colaborar mucho con las autoridades policiales en varios casos de la ciudad”.

 

 

 

 

EL PACTO DE SAN ANTONIO
El Pacto de San Antonio de Padua está basado en la encíclica Papal Laudato Si (“Alabado sea”), en la que apela a las Naciones desarrolladas a cuidar el Medio Ambiente. Se incluyen compromisos para combatir el narcotráfico, la trata, la pobreza, la desnutrición y el abuso infantil, la violencia de género, el daño ecológico y garantizar el acceso a la educación, la salud y el agua potable.

El objetivo del acuerdo no se agota en el aspecto declarativo. A partir de ordenanzas municipales, se crearán «Observatorios» que encararán el seguimiento de las políticas para abordar los objetivos incluidos en el Pacto firmado por los intendentes y se impulsarán cambios de paradigmas en términos de conductas individuales y colectivas, siempre orientados a cuidar la «Casa Común», el Planeta Tierra, en general, y la sociedad en particular.

En la Encíclica Laudato Si, que constituyó una referencia para el Pacto de San Antonio de Padua, el Papa advirtió que a muchos «no parece preocuparles una justa dimensión de la producción, una mejor distribución de la riqueza, un cuidado responsable del ambiente o los derechos de las generaciones futuras».

El Santo Padre alertó en esta reflexión que no hay conciencia clara de los problemas que afectan a los excluidos. «Ellos son la mayor parte del planeta, miles de millones de personas. Hoy están presentes en los debates políticos y económicos internacionales, pero frecuentemente parece que sus problemas se plantean como un apéndice, como una cuestión que se añade casi por obligación o de manera periférica, si es que no se los considera un mero daño colateral», enfatizó.