DEMOLICIÓN

5 - marzo - 2008

Prosiguiendo con las acciones tendientes a lograr una mejora efectiva en la calidad de vida de vecinos de la ciudad; en la mañana de hoy, personal de la Subsecretaría de Servicios Públicos de la Municipalidad de Puerto Madryn, acompañados por el titular del área Luis Tapia; procedió a demoler otra de las casetas para residuos (que tradicionalmente los habitantes del barrio denominan compactadoras a pesar que no cumplen con es función) en las 630 Viviendas (Barrio Rucalhué).
Cabe recordar que dentro de las medidas tomadas para reducir la existencia de focos potencialmente peligrosos en materia de infecciones así como disminución de animales virtuales vectores de múltiples enfermedades en forma gradual se fueron demoliendo las casetas de referencia siendo reemplazadas por contenedores apropiados y canastos de generosas proporciones que permiten el retiro de los residuos por parte de camiones porta volquetes, sin que ni las personas que viven en el barrio ni los trabajadores, tengan que estar expuesto a lo señalado anteriormente.
Precisamente dando continuidad a esta decisión, en la mañana de hoy, una pala cargadora de la Subsecretaría demolió una de estas casetas ubicada sobre la calle Magallanes, la que será reemplazada por sendos cestos ubicados a metros del edificio.

LO LAMENTABLE
Lamentablemente todo indica que existen personas que no terminan de comprender en forma acabada lo que significa vivir en sociedad; donde deben anteponerse los beneficios del conjunto de la sociedad por sobre los meramente particulares. La caseta mencionada tenía adosados sendos paredones en los laterales –construidos por un particular; los que lógicamente al demoler la caseta fueron afectados, tomándose en consecuencia la decisión de continuar con su demolición. En ese momento, personas no identificadas comenzaron a apedrear la cabina del maquinista produciendo la rotura del parabrisa y que el operario deba ser atendido por un profesional médico ante la posibilidad que algún pequeño fragmento de vidrio hubiese ingresado en sus ojos. Es importante tener en cuenta que los paredones indicados se encuentran construidos sobre lo que se denomina espacio común; vale decir que no es propiedad de un vecino en particular.
Este accionar resulta particularmente repudiable ya que surge como reacción ante una medida que pretende lograr una mejora efectiva en la calidad de vida de los vecinos. Algo que pareciera, no es entendido por todos.