LOS NONOS MURGUEROS RECIBIERON INSTRUMENTOS DE PERCUSIÓN

18 - marzo - 2013

Con fuerte impronta en promover y generar espacios de participación para un envejecimiento activo con inclusión social y contribuir con la difusión del arte, se hizo entrega de instrumentos musicales a los adultos mayores que asisten a Hogar Municipal de Día Nuestros Abuelos y conforman la murga “Los Nonos Murgueros”.
Marisa Bauer, Directora Municipal de la Tercera Edad agradeció al Ministerio de la Familia y Promoción Social por la colaboración del gobierno provincial y puso de relieve que la actividad artística es una herramienta de inserción cultural esencial en el ámbito de una comunidad y que en estos espacios de expresión artística el adulto mayor se hace protagonista activo de las experiencias de enseñanza y aprendizaje y esto favorece y mejora su propio desarrollo y su calidad de vida.

A puro ritmo

La murga cuyos integrantes promedian los 70 años de edad, ya cuenta con 4 años de formación. Hoy son diez los adultos mayores que la integran y cuatro los asistentes que los acompañan junto a la Directora Municipal de la Tercera Edad, quienes desde el 9 de septiembre participan de una multiplicidad de eventos con el objetivo de contagiar felicidad y vitalidad. Asimismo, se destaca que todos aquellos adultos mayores que quieran ser parte de ésta gran familia pueden acercarse a los ensayos que se realizan los días lunes y jueves de 10 a 12 horas en el Hogar Municipal de Día Nuestros Abuelos sito en Albarracín Norte 3098 Barrio San Miguel.
“Los Nonos Murgueros” surgieron el 09 de septiembre del año 2009 a partir de la implementación de un taller municipal de percusión destinado a adultos mayores que asistían o residían a los Hogares de Ancianos.
A cargo del Prof. Juan Pablo Solco, el taller comenzó a fortalecerse y fue declarado de interés Municipal y Provincial, a la actualidad, participan en eventos, desfiles, actos, carnavales y actuaron junto a la reconocida murga uruguaya “Falta y Resto” en su paso por la ciudad.
Los Nonos Murgueros son un canto a la vida, se pintan la cara, se ponen sus trajes y dejan atrás los años y algunos dolores, ellos van a donde los inviten para regalar un ejemplo de vitalidad y de ganas de seguir disfrutando de la vida.