Con motivo de recordar la semana de los pueblos originarios, en el Centro de Desarrollo Infantil Comunitario Elsie Williams de Bezunartea (CDICo) dependiente de la Dirección de Desarrollo Infantil de la Subsecretaría Municipal de Niñez, Adolescencia y Familia, se llevó a cabo un proyecto durante varios días del mes de abril con el objetivo de dar a conocer los distintos pueblos originarios del país, su modo de vida y algunos aspectos de su cultura en el pasado y en la actualidad, sus prácticas culturales de antes como algunas de las que permanecen vigentes.
En este marco se invitó a las familias a sumarse con un mensaje, reflexión, imágen, fotos, dibujos, cuentos, leyendas, para preparar una pared /mural; el punto de partida de éste mural lo dio una bandera Wiphala (bandera de los pueblos originarios) que preparon los niños y niñas junto a las asistentes del CDICo. Durante la semana, la pared fue llenándose de los mensajes en los que trabajaron cada familia.
Paralelamente se llevó a cabo una actividad junto a los miembros de la comunidad Pu Fotum Mapu (Hijos de la Tierra), a fin de celebrar el Día de la Tierra, Pacha en quechua, Mapu en mapuzungún, distintas formas de nombrar la “gran casa“ que habitamos distintas etnias, así celebramos a nuestros pueblos originarios y a la tierra, con presencia de algunas mamás y papás que se sumaron a la propuesta de la comunidad mapuche-tehuelche.
Gladis Ñanco, representante de la comunidad, dispuso la bandera mapuche en las mesas y varios tejidos e instrumentos, la primer propuesta consistió en trabajar pequeñas piezas de cerámica contando los usos que se le daban antiguamente, luego continuaron con un telar en el que trabajó cada niño y niña.
Gisela Odriozola, directora del CDICo señaló que “con sus pequeñas edades los chicos nos sorprendieron, nos maravillaron con el entusiasmo, interés y disfrute que generó en ellos, creemos que los valores de respeto, dignidad sobre la identidad de los pueblos, de quienes somos, se construye desde el momento en que nacemos, más aún, desde nuestra concepción”.
Asimismo destacó que el derecho a la identidad, en éste caso, como todos los derechos de niños y niñas, son ejes que atraviesan nuestras propuestas; “estas experiencias vividas, con alegría, donde los niños pudieron manifestarla a través del arte, de una expresión cultural, como la cerámica, el telar, la música con instrumentos originarios son parte de esa construcción a la que nos referíamos antes, ser en el mundo”, concluyó Odriozola.